La Lucha Canaria es el deporte tradicional más popular y practicado en el Archipiélago. Sus orígenes se remontan a los tiempos de los primeros habitantes de las islas y era utilizada por los aborígenes canarios en ocasiones importantes para resolver conflictos. En la actualidad, está categorizada como una lucha de origen prehispánico y está incluida en la Federación española de Luchas.
Según el reglamento técnico de Lucha Canaria aprobado en La Laguna (Tenerife) en 1989: “La Lucha Canaria es un deporte vernáculo de las Islas Canarias, caracterizado por su habilidad y su nobleza, teniendo como principio básico el desequilibrio del contrario hasta hacerle tocar el suelo con cualquier parte de su cuerpo que no sea la planta del pie empleando para ello las denominadas mañas o técnicas”.
Por tanto, las principales características de este deporte son, por un lado, la habilidad del luchador para aprovechar la fuerza del contrario en el combate y, por otro, la intención de desequilibrar al contrincante sin herirlo hasta que toque el suelo.
La luchada y las mañas
La luchada se celebra entre dos oponentes, que se enfrentan en los denominados “terrenos”. Los terrenos de lucha son círculos de arena o tierra batida donde los luchadores tratan de tumbar al contrario, sin salirse de los límites dibujado en el suelo. La lucha o brega comienza cuando los dos adversarios se colocan en posición de agarre: mano izquierda – pantalón derecho. En el siguiente minuto y medio y sin salirse del terrero deben desequilibrar al contrincante, sin poder golpear, ni utilizar llaves, solo con ayuda de las llamadas mañas.
Las mañas son técnicas que se pueden categorizar en varios grupos: de agarre, en las que se coge y levanta en peso al adversario; las conocidas como cogidas; de bloqueo, en las que se utilizan los brazos y piernas para bloquear una parte del cuerpo del contrario; y las de desvío, con las que se trata de desestabilizar al otro luchador utilizando la propia fuerza. Existen otras mañas, también llamadas artes o geitos, muy conocidas como: Burra, Cogida de Muslo, Cango, Pardelera, Toque por Dentro, Toque para atrás, Atravesada, Garabato, entre otras.
El equipo, el Puntal y el Mandador
Normalmente, en la Lucha Canaria compiten dos equipos, formados por doce luchadores cada uno, aunque esta cantidad puede variar. Los luchadores suelen ser deportistas de complexión fuerte y gran peso. Pero en este deporte la fuerza no es lo único que importa, pues es necesario controlar las distintas mañas para vencer, así como estudiar al contrincante.
Dentro de ambos equipos existen dos figuras importantes que son el Puntal y el Mandador. Por un lado, el Puntal es el luchador que presenta las mejores condiciones técnicas y físicas. Por otro lado, el Mandador es el responsable de decidir qué luchador salta al terreno. La luchada la gana el equipo que consigue mantener el mayor número de luchadores en pie. Además, existen diferentes modalidades de luchas. Puede ser por equipos, a tres agarradas, lucha corrida o todos contra todos, o bien enfrentamientos individuales divididos por pesos, categorías o desafíos.
Como en todos los deportes, siempre existen deportistas que destacan. En la Lucha Canaria ha habido figuras importantes como Francis Pérez o “Pollito de la Frontera”, uno de los luchadores más emblemáticos de finales de siglo XX, cuya dedicación a este deporte fue encomiable. En el siguiente enlace se puede acceder a un video con los mejores momentos de este gran luchador.
Este deporte, seña de identidad de la cultura canaria, está presente en todo el Archipiélago. Tiene más afición en las zonas rurales, pero gracias a las instituciones y a las empresas privadas existen buenos terreros así como clubes de luchas y escuelas. Además, se han desarrollado proyectos para establecer intercambios con países como Venezuela y Cuba, donde a través de los inmigrantes de origen canario se sigue practicando la Lucha Canaria.
La Lucha Canaria ha ido creciendo en cuanto a estructura de equipos, infraestructuras y dinero que se invierte. Esto ha hecho que se consolide como un deporte arraigado a la tradición canaria que se ha ido transmitiendo de generación en generación.
Por Paula Vera
Fotos: Gobierno de Canarias, Fundación Disa, aguimes.es