Las Islas Canarias no sólo son conocidas por sus paisajes volcánicos y playas paradisíacas, sino también por su rica biodiversidad. Este entorno privilegiado ha propiciado el desarrollo de una flora única, donde destacan numerosas plantas medicinales canarias que han sido utilizadas a lo largo de la historia por sus propiedades curativas.
Gracias a su clima subtropical y a la influencia de distintos ecosistemas, Canarias alberga especies vegetales exclusivas que han sido aprovechadas durante siglos por sus habitantes para tratar dolencias y mejorar la salud. A través de la medicina popular canaria, estos remedios naturales han pasado de generación en generación, conformando un valioso legado que sigue vigente en la actualidad.

Medicina Popular Canaria: Un Legado de Sabiduría
Desde tiempos ancestrales, los habitantes de las Islas Canarias han recurrido a las plantas medicinales para tratar diversas dolencias. Este conocimiento, transmitido de generación en generación, se remonta a los indígenas canarios y ha sido enriquecido con aportes de otras culturas tras la colonización.
En épocas en las que el acceso a la medicina moderna era limitado, los remedios caseros basados en plantas eran fundamentales en el día a día de las familias canarias. Las infusiones, emplastos y ungüentos elaborados con hierbas autóctonas eran utilizados para aliviar afecciones digestivas, respiratorias y cutáneas, entre otras.
Las abuelas y abuelos canarios han sido los grandes guardianes de este conocimiento, que hoy sigue despertando interés gracias al auge de la fitoterapia y la búsqueda de alternativas naturales para el bienestar.

Plantas Medicinales Canarias: Un Tesoro Natural
A continuación, te presentamos una selección de las plantas medicinales más representativas del archipiélago, destacadas por sus propiedades terapéuticas:
Té Canario (Jasminum odoratissimum)
Conocido por su agradable aroma, el té canario se ha empleado tradicionalmente en infusiones para aliviar dolores de cabeza, síntomas gripales y problemas estomacales. Aunque no se comercializa ampliamente en las islas, su uso doméstico ha sido común en la medicina popular.
Mocán (Visnea mocanera)
Árbol endémico de Canarias, el mocán produce frutos que, en el pasado, fueron consumidos por los aborígenes. Además de su valor nutritivo, se le atribuyen propiedades medicinales, como la regulación del tránsito intestinal y el alivio de afecciones respiratorias.
Vinagrera (Rumex lunaria)
Esta planta, reconocible por sus hojas carnosas y sabor ácido, ha sido utilizada para tratar problemas digestivos y como diurético natural. También se emplea en la cocina local para añadir un toque ácido a diversas preparaciones.
Nauta (Nauplius sericeus)
Conocida por sus flores amarillas, la nauta se ha empleado en la medicina tradicional canaria para tratar afecciones cutáneas y como antiinflamatorio. Sus hojas, aplicadas en forma de cataplasma, ayudan a reducir inflamaciones y acelerar la cicatrización de heridas.
Cardo Borriquero (Silybum marianum)
También conocido como cardo de burro, esta especie es muy común en las Islas Canarias. Posee propiedades diuréticas y tónico-hepáticas, estimulando el hígado y ayudando a reparar las células enfermas de la vesícula biliar. Se suele consumir en infusión, dejándola reposar tras la cocción.
Hierba Luisa (Aloysia citrodora)
Esta planta aromática es recomendada para combatir espasmos estomacales, vómitos y problemas de insomnio. Su infusión, con un sabor y olor agradables, es ideal para tomar después de la comida o antes de dormir.
Perejil de Mar (Crithmum maritimum)
Conocido también como hinojo marino, al perejil de mar se le atribuyen propiedades digestivas, diuréticas y depurativas. Su consumo en crudo es la mejor opción, aunque también puede prepararse en infusión para potenciar sus beneficios depurativos.
Salado Blanco (Schizogyne sericea)
Las infusiones de hojas y flores de esta planta son utilizadas como analgésico y astringente. Aplicada sobre la piel en forma de cataplasma, actúa como antiinflamatorio y favorece la cicatrización de heridas.
Lechuga de Mar (Astydamia latifolia)
Planta rica en vitamina C con propiedades antiescorbúticas. Se consumen en infusión sus hojas y tallos tiernos, ya que posee acción diurética, es útil para dolencias estomacales y ayuda a regular la menstruación.
Uva de Mar (Tetraena fontanesii)
Se trata de una planta con propiedades dermatológicas y cicatrizantes cuando se aplica en forma de cataplasma sobre la piel. Además, sus hojas y brotes tiernos son comestibles y aportan un alto contenido en sales minerales.

Preservación del Conocimiento Tradicional
Es fundamental reconocer y valorar el legado de la medicina popular canaria, basado en el uso de plantas medicinales canarias. Aunque la medicina moderna ha avanzado significativamente, estos conocimientos ancestrales ofrecen alternativas naturales y complementarias para el bienestar.
Iniciativas como la del Jardín Botánico Canario Viera y Clavijo y otros centros de investigación han trabajado en la catalogación y preservación de estas especies, asegurando que su uso y beneficios sean comprendidos y aprovechados por las futuras generaciones.
El archipiélago sigue siendo un laboratorio natural donde la sabiduría de la naturaleza se entrelaza con la historia y la identidad de su gente. Conservar este patrimonio no solo enriquece la biodiversidad, sino que también mantiene viva una parte esencial de la cultura canaria.
Canarias es una tierra con mil cosas para ver, explorar y conocer. Si estás interesado en conocer más datos interesantes sobre Doramas, el aborigen de Gran Canaria, y las Islas Canarias, su cultura y sus tradiciones, te dejamos a continuación el enlace a la sección Cultura y tradiciones.